INTRODUCCIÓN
Numerosas son las instituciones del Derecho Administrativo que han recibido una profunda y rica influencia del Derecho Civil. Incluso algunas de ellas son oriundas del Derecho Procesal y todo ello revela que, por autónoma que sea una rama de las ciencias jurídicas, su aislamiento de las demás no sólo es imposible, sino absolutamente indeseable.
El obstinado empeño de olvidar el origen de las cosas, conduce con frecuencia a los mayores desatinos en el tratamiento de ciertos conceptos jurídicos y sorprende advertir que estas inveteradas equivocaciones llegan a convertirse, por el sólo transcurso del tiempo, en dogmas inconmovibles que rechazan cualquier revisión verdaderamente científica. Señalar que el Derecho es un todo parece una perogrullada, pero resulta verdaderamente llamativo constatar la facilidad con que ello suele olvidarse.